Muchas veces nos sentimos frustrados ante la expectativa de la sanación. ¡No acabo de curarme! ¡Esto no se acaba nunca!. Solemos escuchar o decir frases así, pero ¿qué es lo que pretendemos al sanar?.
Si nos dejamos llevar al principio de la Biodescodificación, esta es una de las frases fundamentales «la enfermedad nos enseña algo que no gestionamos bien en nuestra vida». Bien, ¿cuál es ese aprendizaje entonces? Si yo estoy viviendo un conflicto en mi familia, o en mi trabajo, o con mi pareja, y no soluciono esta situación, aparecerá un síntoma que me indicará el tipo de conflicto que estoy viviendo.
Desde la medicina tradicional, lo que hacemos es proponer un remedio para ese síntoma, para ese dolor, y no nos ocupamos del conflicto que ha dado origen a este síntoma. Pero cuando hacemos Bio, lo que nos interesa es lo que nuestro cuerpo nos está gritando, lo que nos enseña ese síntoma, entonces sí solo nos ocupamos de que el síntoma desaparezca, estamos usando la Bio como la medicina tradicional, solo buscamos la desaparición del síntoma, y ese enfoque erróneo es el que hace que muchas veces el síntoma perdure.
Nuestro cuerpo nos habla con la intención de que aprendamos de esa situación, de ese conflicto, para que en el futuro, nosotros y las generaciones siguientes, sepamos gestionar de manera más positiva esa situación. Veamos un ejemplo:
Si yo tengo una dermatitis porque he perdido el contacto con mi novia, y esto me ha llevado a sentirme hundido, a pensar que no sería capaz de volver a tener otra relación, a culparme por no ser lo suficientemente bueno etc. Si yo solo busco que la dermatitis desaparezca, estoy proyectando toda mi energía en esa dermatitis, pero no estoy aprendiendo la lección, esa lección que me dice que mientras yo me sienta dependiente de los relaciones, mientras me sienta culpable por no ser lo suficientemente bueno, mientras crea capaz de establecer una relación que me traiga paz, y esa relación solo puede ser conmigo. Mientras no vea y comprenda todo esto, por muchas cartas y duelos y bios que haga, difícilmente desaparecerá la Dermatitis.
Por el contrario, si yo integro esta información, si aprendo la lección se producirá la sanación. Que no siempre es la desaparición del síntoma, sino el aprendizaje que me proporciona mi cuerpo.
No confundamos la sanación con la desaparición del síntoma. La sanación se da cuando existe ese aprendizaje, el síntoma puede remitir, aminorar, disminuir o desaparecer, pero eso es otra cosa.
-Salvador Gómez-
Puedes ver también SANAR LA RELACIÓN CON LA MADRE.