La sal es un limpiador de energía porque cuenta con múltiples propiedades que van más allá de su modesto uso en la cocina. La sal elimina las malas energías que puedes encontrar en tu casa o centro de trabajo. También puede alejar la envidia y mala suerte.
La energía negativa nos inunda y lo que hace es debilitarnos impidiendo que podamos hacer vida normal y tranquila. Hay personas que pueden drenar nuestra energía en el trabajo o en el hogar, haciendo que nuestro estado de ánimo decaiga.
El aura es un campo electromagnético que rodea a personas y objetos. Es imperceptible al ojo humano común, los colores del aura pueden ser captados por personas con la capacidad de videncia desarrollada o equipos fotográficos preparados para este fin como la cámara Kirlian.
Se presenta en distintos colores según el estado de ánimo o la personalidad y aunque parezca increíble, puede dañarse o romperse por diversos motivos. Refleja nuestra energía vital y puede interrelacionarse con la energía de otros seres, objetos o espacios con los que nos relacionemos.
Estar en contacto con personas que drenan la energía, pasar mucho tiempo en ambientes negativos, depresión, enojo, ansiedad constante, entre otros.
Puedes usar la sal para limpiarte de las energías negativas cuando sientes que:
Así que si últimamente te sientes triste, de mal humor o ansiosa sin razón aparente, puede ser que tu aura necesite una limpieza de las malas energías que hay a tu alrededor.
Aunque muchos consideran que la sal es un elemento de mala suerte, en realidad puede ayudarte a liberarte de energías negativas.
Primera forma: Consigue sal fina y en la ducha talla tu piel con ella, procurando dejarla unos minutos reposando sobre tu cuerpo. Una vez que hayan pasado al menos 5 minutos, retírala con abundante agua.
Segunda forma: Una forma rápida de limpiar nuestra aura es, al momento del baño, tomar un puñado de sal marina y manteniéndola dentro de la mano, frotar la piel como si se tratara de una esponja, de arriba hacia abajo. La sal no tocara la piel en ningún momento, solo lo hará la mano cerrada. Finalizada la limpieza, botar la sal por el desagüe.
Tercera forma: Realiza baños de agua con sal en los pies. Para eso debes conseguir un recipiente grande o en tu propia bañera. Llenarlo de agua y añadir 1 taza de sal de mar. Metes los pies e intentas relajarte durante unos 20 minutos. Puedes hacer uso de un poco de aceite aromático, te sentirás con fuerza y renovado.
Para alejar toda clase de malas energías, impurezas, pensamientos negativos, estrés y malas vibraciones. Solo tienes que limpiar el suelo de tu casa todos los día con agua y sal marina en vez de usar desinfectantes.
Después de hacer esto te aseguro que vas a sentir una gran diferencia en casa. Además puedes hacer uso de inciensos de mirra o lavanda en los diferentes ambientes de tu casa para que sientas la paz y tranquilidad nuevamente.
Por Aleja Bama
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