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Algo se está armando todo el tiempo. Y uno puede lograr la capacidad de direccionar. ¿Cómo se adquiere esa capacidad? Estando presentes. Sabiendo que siempre, todo lo que ocurre, fue nuestra creación. Aceptando nuestro papel de creadores.

Cada vez que tenemos un problema que nos parece individual, toda la familia está relacionada. En el momento en que nos hacemos conscientes, de una manera o de otra la familia comienza a evolucionar. No sólo los vivos, también los muertos.

Hay personas que entran en tu vida y lo cambian todo, personas por las que vale la pena parar, respirar y valorar. Valorar lo que realmente importa.

Cuando estamos bien, nuestra piel está radiante, sin asperezas ni enrojecimientos. Sin embargo, cuando nos sentimos mal, nuestra piel muestra signos difíciles de ocultar como psoriasis, granos, manchas, herpes, etc.

Cuando llevamos a cabo el perdón, queda espacio para pensar y sentir cosas diferentes, cosas positivas, enriquecedoras, aunque bien podríamos perdonar algo y engancharnos con otra cosa que igualmente nos reste, pero no es lo usual.

Nos referimos a esa tos sin razón aparente que ocurre en algunos momentos del día a día o bien de manera crónica (diariamente varias o muchas veces).

Hay muchas formas de reparar las historias de nuestro árbol, y quiero recordar que cuando utilizo la palabra "reparar" no me estoy refiriendo a solucionar, sino a hacer algo que está relacionado con una historia de nuestro clan...

El amor se debe demostrar, pero nunca jamás se debe mendigar. El hecho de tener que hacerlo es el más fiel de reflejo de la injusticia emocional, del desequilibrio que vive el sentimiento que cimienta una relación.

i dejamos de luchar y de resistirnos a lo inevitable, viviremos plenamente el presente, permaneciendo abiertos a todas las opciones sin aferrarnos rígidamente a ninguna de ellas. Cosas que debes dejar ir.

No intentes cambiar a nadie, entra en tu propio silencio, y en forma suave y callada, deja que tu luz interna se filtre por tu mirada.