Hay momentos en donde te das cuenta de que no has aprendido a vivir por tu propia cuenta, cuando la ausencia mas mínima la sentirás inmensa, quizá te sea imposible soportar esa situación, sentirás que no puedes respirar, un dolor profundo en el pecho que te angustia.
Lo que debemos entender es que la llegada del amor no depende de nosotras, no es una decisión que tomamos un día y ya. Muy por el contrario, el amor por lo general llega de forma inesperada, en el momento menos pensado.
Desiste entonces de esa actitud, con la que fuerzas las cosas como si fueras a elegir un vestido. Deja de contradecir tus propios deseos, deja de lamentarte por tu corazón lastimado, cuando eres tú la única que elige a quienes lo destruyen.
Eres tú quien elige.
Recuerda que eres tú quien le da poder a las personas para lastimarte, por sentir sin pensar, por tomar la primera opción y aceptar a cualquiera. Date cuenta que cuando algo no marcha bien en cuestiones del corazón recuerda que no existe la mala suerte, pero si las malas elecciones y eres tú quien eligió mal.
Ya no busques mas quién te llene los vacíos de tu propio ser, porque eso solo te corresponde a ti, así que no hay nadie quien pueda llenar ese vació, nadie excepto tú.
Aún así, no debes cerrarte a la oportunidad de que un día, el menos esperado, sin anuncio ni señal, ese alguien llegue a tu vida.
Ya no busques mas el amor por las razones erradas, concentra tu energía en ti, en ser mejor persona, en ser una mujer más fuerte, y así, como en un acto de magia solo aparecerá.
No te obsesiones, pero tampoco te des por vencida. Cuando estés lista para amar de nuevo lo sabrás, mientras tanto, vive el momento.