El triptófano es el ingrediente clave para la producción de serotonina. Este aminoácido esencial es uno de los favoritos de nuestro cerebro por su efecto relajante, por mediar como agente beneficioso en nuestras épocas de insomnio e incluso en los trastornos de ansiedad. Este precursor de la serotonina es una pieza indispensable para nuestro estado de ánimo y nuestro bienestar.
La literatura científica es muy clara a la vez que concluyente: el triptófano nos ofrece calidad de vida. Así, no faltan los estudios que nos indican de forma reiterada que consumir alimentos ricos en triptófano o complementos dietéticos, contribuye a mejorar los estados depresivos, a regular nuestro estrés, a optimizar el proceso de envejecimiento e incluso a reducir las conductas agresivas.
La verdad, es que cada vez se descubren muchas más cosas sobre este componente casi mágico de nuestro organismo. Sin embargo, es importante matizar un aspecto clave: estamos ante un aminoácido esencial, por tanto, tal y como la palabra indica, nuestro cuerpo no puede fabricarlo. Necesitamos cuidar nuestra dieta e incluir esos alimentos ricos en triptófano con los cuales, poder mediar a su vez en una adecuada producción de serotonina.
¿Qué es el triptófano y qué propiedades tiene?
El triptófano es un aminoácido esencial, ese cuya fórmula molecular es C11H12N2O2. Sabemos ya que sin él no podríamos producir la suficiente serotonina como para garantizar nuestro equilibrio emocional, nuestra digestión o incluso un correcto descanso nocturno. Ahora bien, esta molécula multipropósito es clave para otros muchos procesos:
- Nos ayuda a sintetizar proteínas, además las vitaminas del complejo B.
- El triptófano es esa llave maestra que estimula a la glándula pineal para que esta segregue melatonina, básica para nuestros ciclos de sueño-vigila y para frenar a su vez el envejecimiento prematuro.
- Este aminoácido esencial tiene un efecto antidepresivo muy interesante debido, como ya sabemos, a su mediación en la producción de serotonina.
- Además, es un buen ansiolítico y se sabe, como ya hemos señalado, que reduce incluso las conductas agresivas.
- El triptófano se utiliza a menudo como complemento dietético en personas con obesidad al regular la ansiedad por comer.
¿Dónde se sintetiza el triptófano?
Este dato es sin duda interesante. La mayoría de nosotros pensamos que gran parte de nuestras hormonas, neurotransmisores y algunos aminoácidos se sintetizan en el cerebro pero, sin embargo, no es así. Un ejemplo: en nuestro sistema nervioso central solo se encuentra un 5% del total de nuestra serotonina. Entonces.., ¿dónde está el resto, dónde se produce? En el intestino delgado.
Es interesante saber que contamos con un fascinante vínculo entre el intestino y el cerebro, un sistema bidireccional entre ambos donde quedan unidos los centros emocionales y cognitivos del primero con el funcionamiento periférico del tracto digestivo.
Aún más, un aspecto importante que no podemos perder de vista es el hecho de que contar con una flora intestinal fuerte y sana, equivale a una mejor producción de triptófano, y en consecuencia, de serotonina.
Todo ello nos lleva a la sencilla conclusión de que es básico cuidar al máximo nuestra alimentación y no limitarnos solo a elegir determinados productos por encima de otros (ricos en grasas saturadas, harinas refinadas, etc.) sino que también importante conocer el origen de los mismos.
Las verduras y las frutas de cultivo orgánico son las más recomendables para asegurarnos de que contienen todas las vitaminas y aminoácidos esenciales como el triptófano.
¿Qué alimentos son ricos en triptófano?
Algo que todos sabemos es que las farmacias están llenas de productos dietéticos ricos en triptófano. Así, es más que común encontrar tabletas o botes con triptófano y melatonina, triptófano con magnesio y vitamina B6, etc. Ahora bien ¿es adecuado recurrir a estas fórmulas en vista de que este aminoácido es clave para nuestro bienestar?
La respuesta es sencilla: antes de recurrir a estos productos es necesario contar con el consejo médico. No todas las personas pueden consumir estas propuestas dietéticas, es más, en caso de que ya sigamos un tratamiento para la ansiedad o la depresión no es recomendable recurrir a ellas. Consultemos antes con los especialistas y limitémonos, sencillamente, a cuidar al máximo nuestra alimentación.
Veamos qué alimentos son ricos en este aminoácido esencial:
Aves de corral como el pollo o el pavo, salmón, sardinas, bacalao., atún, yogur, kéfir, berros, avena, arroz integral, habas, guisantes, lentejas, piña, plátano, alcachofas, almendras, nueces, semillas de calabaza, semillas de girasol, chocolate negro.
Para concluir, lo ideal es mantener una dieta variada y equilibrada donde no cometer excesos, donde tengamos en cuenta también nuestras necesidades y particularidades. Si tenemos una enfermedad, si ya tomamos ciertos fármacos, tenemos alergias o cualquier otra singularidad, lo mejor es consultar a un médico.
No obstante, nunca está de más recordar que aquello que comemos (o que no comemos) influye de forma directa en nuestro estado de ánimo, ahí donde muchas veces el triptófano es la auténtica clave de ello.